de navegar buscando otros horizontes,
de sujetar las bridas y cabalgar
con el viento a nuestras espaldas.
De buscar un motivo para vivir fuera
de esta cárcel de guarismos binarios,
lejos del brillo fosforescente de las pantallas.
Ver los colores originales, que no estén
adulterados en H.D.M.I. ú O.M.D.
Saber a qué huelen las personas,
a qué saben los besos
y cómo suenan las palabras, cuando salen
directamente de la boca, sin " samplers"
o efectos de sonido.
Vivir una realidad, que aunque incómoda,
nos muestra el mundo en que nos movemos
y sentimos.
Crear esa capacidad de asumir,
que hay valores que recuperar
y toda una vida que vivir,
sin que una "voz en off" nos diga
cómo tenemos que vivirla, reírnos con ganas
con un programa de humor, que carezca
de " risas pregrabadas". En fin...
¡Vivir de verdad!.
Escrito en Julio 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".
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