con la humedad saturada, goteando
por tus muslos, y un brillo de deseo
ardiendo en tu mirada.
Con la resolución de un depredador hambriento de carne, en la concupiscencia
que atrae a los cuerpos, hacia un destino
de fuego y agua, susurros y quejas;
que en el aire se elevan en formas
piramidales o en intrínsecas oquedades,
que anhelamos llenar con nuestras ansias,
aún divagantes, aún no resueltas.
La noche se ciñe con su diadema
de fulgurantes astros y siento que me devoras
lentamente, como hembra de Mantis Religiosa,
fagocitando al macho durante la cópula.
Escrito en Mayo 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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