tanto el amor, que cuando sueño,
siento que en mi razón, no soy su dueño,
parece que en el amor, soy un proscrito.
No debo comentar, que me he entregado
en cuerpo y alma, como amante
y sólo recibí más de un desplante,
pues el amor que di, me fue negado.
No debo de decir, que tanto añoro,
desde mi juventud, tu cuerpo laso,
que preso en el vacío del fracaso,
a veces me entristece y hasta lloro.
No debo comentar, que mi esperanza,
quedó por tu abandono, sepultada,
no debo de soñar con la esperada
amante, pues no encuentro su semblanza.
No debo de decir lo que he nombrado,
si en el amor no tuve buena suerte,
acaso lo hallaré, tras de mi muerte,
me siento en esta vida desahuciado.
Escrito en Junio 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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