la capacidad de vivir en un anhelo,
pues si un día, has decidido alzar el vuelo,
en tu ánimo, jamás ya se posterga.
La esperanza de tocar de nuevo el cielo
y alcanzar ese sueño deseado,
por su impulso, no será ya postergado,
porque nace de tu fe, y es tu consuelo.
Si te falta la esperanza, es el hielo
que detiene la razón y la mancilla,
sé tú el barco, que destruye con su quilla,
todo obstáculo, temores o recelo.
Pues, quien sueña y un propósito persigue,
por la fuerza que encontró en su voluntad,
resolviendo toda la dificultad,
es seguro que su meta, al fin consigue.
Escrito en Junio 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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