el saber corresponder a ese saludo,
que te brindan en la calle muy a menudo
y poderlo disfrutar, suave, sin prisas.
Escuchar siempre la voz de la experiencia,
respetar a los mayores y atenderlos,
aunque cueste muchas veces comprenderlos,
les debemos el respeto y la paciencia.
Me conmueven esas lágrimas del duelo,
si fallece esa persona que quisimos,
las debemos procesar, mientras vivimos,
elevando una plegaria al alto cielo.
El amor siempre me llega con retraso
y caduca a una gran velocidad,
pues la causa de tal caducidad,
es debida a la ignorancia y el fracaso.
Me consume, porque no nos conocemos,
se ha perdido solidez, la relación,
ya no tiene esa base en la intención,
ni siquiera un argumento proponemos.
No hay amor que nos perdure muchos años,
nos hicimos obviamente indiferentes,
caminamos sin saber, entre las gentes,
como lo hacen por desgracia, dos extraños.
Escrito en Junio 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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