con el corazón henchido,
después de lo que has sentido
en este peregrinar,
donde la hospitalidad
de un pueblo sientes cercana,
pues su corazón emana
todo un rasgo de amistad.
Una nostalgia te embarga
y aún, con ganas de llorar,
pensarás en regresar,
no habrá despedida amarga.
Pues dentro, en tu corazón,
se alberga ese sentimiento,
que viviste en el momento,
en que brotó una ilusión.
El reencuentro con personas,
de almas, que al ser tan puras,
se elevan en las alturas
en un vuelo de palomas.
Blanca paloma, en un lazo
que aprieta y que fuertemente
fluye en su intenso torrente,
al recorrerte en su abrazo
un cúmulo alegrías,
pues el hecho de existir,
te permite compartir
cada uno de tus días.
Todo lo que llevo dentro,
en un nuevo amanecer,
os prometo devolver
en otro cálido encuentro.
Escrito en Marzo 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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