varía con la luz de tu sonrisa.
La calidez de la brisa
amalgama un mestizaje.
El día es una caricia
bajo el sol del mediodía,
mientras crece la alegría
del sol, como una primicia.
Lloverá, mas sin tristeza,
desde el ático en la nube,
sobre ese lugar que estuve,
que aún mantiene su belleza.
Todo recuerdo incentiva
en nuestra imaginación,
el eco de una emoción
por ser fiel y positiva.
Claro está, la perspectiva
nace de esa percepción,
que en su calificación
puede ser muy relativa.
En la belleza se templa
tu realidad y tu ensueño,
ya que sólo eres el dueño
de aquello que se contempla.
Escrito en Abril 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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