a un milímetro de ti,
el intento es baladí
y empiezo a desesperarme.
Una tibia luz se asoma
en el brillo de tus ojos
y desde tus labios rojos,
tu voz es esa paloma
que vuela desde tu boca
y acaricia mis oídos
con los más gratos sonidos,
que en mi esperanza evoca
el contacto con tu piel
y el sabor de cada beso,
en ese cauto regreso,
disfrutando de tu miel.
Dulce almíbar, que en tu lengua
( precursora de tus labios ),
en distintos escenarios
el tiempo sufre y se mengua.
Y se decide el encuentro
en un beso apasionado.
Tu miel de nuevo he libado
besándote muy adentro.
Beso tu boca en la calma
de encontrar en nuestro amor,
el agradable sabor
que emana desde tu alma.
Escrito en Abril 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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