domingo, 3 de octubre de 2021

Divagar entre recuerdos.

Los ojos  fijos en los cristales, salpicados 
por gotas de lluvia . 
La mirada perdida entre el boscaje 
de los recuerdos más recónditos 
y el hálito contenido, al contemplar 
una imagen con tintes de añoranza .


No existe un pasado que pueda palparse,
cuando el presente es inmediato 
y galopa sin bridas, para alcanzar 
un futuro que jamás  llega a presentarse.


Perdemos algo de nosotros mismos,
cuando nos detenemos en la introspección,
mientras  somos arrastrados por la voracidad 
de un tiempo, que no se demora en sus ansias 
de robarnos cada instante de vida,
que perdemos en la inconsciencia, al viajar 
a un pasado que no ha de retornar.
Amarillo, lívido y deslucido por la opacidad 
de nuestras divagaciones .


Escrito en Octubre 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





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