y el deseo desemboca en la esperanza,
brota en vida, pues la vida sigue en danza
y en sus líneas, sus mensajes siempre leo.
No hallarás similitud, ni semejanza
a cualquier razonamiento coherente,
el deseo deja pronto su simiente,
necesitas de tu aplomo y tu templanza.
Es hermoso que se pueda desear,
el deseo te mantiene en la ilusión,
fortalece así mismo el corazón,
siempre y cuando te permita navegar.
En las aguas que gobiernan la emoción,
el timón ha de cogerse decidido,
el deseo, si te embarga estás perdido
y el naufragio lleva a la desilusión.
El deseo ha de llevar la dirección,
que contemple por su afán, la gratitud
de quien vence a su ignorada esclavitud,
y no pierde ni su paz, ni su razón.
Escrito en Noviembre 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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