jueves, 11 de marzo de 2021

Una lágrima, caminando sobre vidrios rotos.

Un cuerpo es sostenido sobre la levedad
del impreciso tiempo.
Gira la rueda y la existencia, mengua y termina 
para algunos seres.
Tal vez sea la fatalidad del equilibrio 
o la inconsciencia humana, la que provoca 
el final de la catarsis de la vida.


Se mueven las agujas en los hielos
que son arrastrados por los vientos 
 y se divisan vértices enconados,
en una afrenta de vida, manifestada
en una  fiera lucha por la supervivencia.

Hoy he desayunado tristezas y la Luna
ha aparecido en mis crecientes mareas
de melancolía.
Rompo la rutina en mil pedazos,
celebrando la vida con sonrisas aladas
y ese gesto irónico que me caracteriza,
a pesar de caminar sobre los vidrios rotos
de muchas esperanzas perdidas.

Escrito en Marzo 2021 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




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