vida de una dicha, que sueño contigo,
sin ti ya no tengo esperanza, ni abrigo,
es sed de mi boca en mi alma perdida.
Al borde de tu boca, el beso que estalla
telúricamente en un bello sonido
y en ese milagro que se ha producido,
sacias mi avidez y mi boca calla.
Calla en el silencio, que es mudo y sagrado,
en recogimiento, por su adoración,
brota todo amor desde el corazón,
por el dulce beso que me has entregado.
Se cierra mi boca y se abre mi alma
y el amor anega cada cavidad,
viviendo de nuevo esa realidad,
que muestra tu vida en plácida calma.
Amor, no concibo una bella existencia,
si no estás en ella y así cada día,
encuentro un motivo, porque mi alegría
comienza contigo en tu grata presencia.
Escrito en Diciembre 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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