las ventanas de mi intimidad, ni abrazar
el volumen incorpóreo
de cualquier sueño ajeno... Camino.
Los senderos son enigmas que se muestran
sin resolver.
A cada paso nos sorprende un nuevo reto
y siempre encontramos a alguien,
dispuesto a presentar batalla
en un absurdo duelo.
Se pierden la migas de pan,
con las que marcamos nuestros pasos
en el camino o se las comen
las aves de rapiña ¡Da lo mismo!.
El resultado es que estamos extraviados
en un cruce de caminos y ante nosotros
se muestra un bosque oscuro e inexplorado.
Hay zonas tan boscosas y oscuras,
que apenas podemos divisar el cielo.
El calor y la humedad nos puede asfixiar
y el deseo de respirar aire puro, se convierte
en una notoria necesidad.
Sobre el asfalto también crece un bosque
o selva que asfixia nuestra libertad
y forma de vida, entre estructuras
de hormigón.
Escrito en Abril 2019 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz ".


No hay comentarios:
Publicar un comentario