lunes, 27 de abril de 2020

Abriste mis ojos a la luz (dedicado a mi madre ).

Quiero pasar a mi memoria un paño,
quiero pensar al verte en una cosa,
cuando miro tu mano sarmentosa,
labrada por el tiempo año tras año.

Tus ojos van perdiendo resplandor,
pues Aita, ya no sigue entre nosotros
los tiempos que vivimos fueron otros
y aún queda en el recuerdo vuestro amor.

Hay ecos de nostalgia en nuestras voces
y sé que caducaron esos días
que juntos compartimos alegrías
y en fotos que observamos, reconoces.

Siempre has estado ahí y muy pendiente,
abriste tú mis ojos a la luz,
por ti, yo voy creciendo en la virtud,
mi vida es una curva en ascendente.

A veces, hacia ti transmito amor
y en otras te parezco, que perdido
me sientes muy lejano por mi olvido
y sientes sin decir un gran dolor.

Te quiero y si mi mente se entretiene,
que sepas que tú estás en mi camino,
tú has dado nueva luz a mi destino,
por eso en mi memoria se retiene.

Por eso yo prefiero una caricia,
o acaso una mirada de ternura,
se bien, que ya no soy la criatura,
que fue por su niñez, tu gran delicia.

Nadie nace sabiendo, y educar
los hijos, se requiere una paciencia
y no se tienen ni arte, ni más ciencia
que desvivirse en ellos al amar.

Y sé que alguna vez te has preguntado,
si hiciste bien esa dura labor,
observa en el reflejo de tu amor,
que somos tú perfecto resultado.

El fruto de tu amor, así se llama:
reflejo de tu amor en nuestras vidas
y en todas tus metas conseguidas
Y lo has hecho muy bien. ¡Te quiero Ama !.

Escrito en Abril 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".


No hay comentarios:

Publicar un comentario