sábado, 16 de mayo de 2020

Plantas Carnívoras.


Sus flores muestran su hermosura,
abriendo sus pétalos y embriagando el aire
con su perfume hechizado.
Son  el reclamo perfecto para los insectos
que caen, cautivados por sus encantos.

Drosera, Heliamphora, Phinguicula etc.
Tan bellas como mortales, para el insecto
que sólo utiliza su instinto primario.
La belleza puede ser una trampa y sus vidas
dependen más del raciocinio,
que de su adicción a la belleza.

La fuerza del encanto femenino, atrapa
la masculinidad del insecto y lo fagocita
entre letales fluidos.
La percepción del insecto se centra
sólo en la belleza del color y sus aromas,
cuando quiera ser consciente del peligro...
¡Será tarde!.

La razón de su existencia sirvió para alimentar
a quien le atrajo con su magia embaucadora.
¿Os suena de algo esta parábola?.

Escrito en Mayo 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".


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