en una carrera loca,
uno acierta o se equivoca
desde el punto de salida.
Pues no hay que llegar primero,
si no conoces tu meta,
nada hay que te comprometa,
para elegir tu sendero.
Puede ser camino largo,
o corto, pues se deduce,
la ruta que nos conduce,
( sendero dulce o amargo ).
La vida es sólo un camino
que debemos transitar,
lo difícil es pensar,
cuál será nuestro destino.
Al final damos mil vueltas
en torno a una decisión,
para dar con la razón,
entre las aguas revueltas.
La vida acaba disuelta,
entre las horas, perdida,
pues el impulso de vida,
cae por su peso y se suelta.
Escrito en Mayo 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario