miércoles, 30 de noviembre de 2016

Perdona, si no te llamo

Perdona, si no te llamo,
después de tu despedida,
pero es la justa medida
y ya nada te reclamo.

No dejé deuda contigo,
eres tú la acreedora,
pero no es razón, ahora 
y el tiempo será testigo.

Desperdiciaste el momento,
en que me pudiste amar,
sólo quisiste jugar
a romper mis sentimientos.

Ignoras, que en realidad,
por tu falta de conciencia,
sufrirás la consecuencia 
y hallarás la soledad.

Quien cierra su corazón 
al amor y lo traiciona,
ni la honestidad se asoma,
ni esconderá su traición.

En sus obras se ha de ver,
los frutos de su egoísmo,
sin más límite, ni abismo,
que lo que negaste ayer.

Dejaste por realizar,
el amor, que comenzaste,
fué un fracaso, lo fallaste,
no fue tu intención, amar.

La mano muestra su envés
y aunque no te importe nada,
sufrirás la bofetada,
por defender tu interés.

Jugaste con el amor,
agriando sus emociones,
no me sirven tus razones,
cuando me causas dolor.

Así, que no siento pena,
si la vida es mi castigo,
lo que tú hiciste conmigo,
será también tu condena.

Escrito en Noviembre 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."Zuhaitz".

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