miércoles, 30 de agosto de 2017

¡Mírame a los ojos!.

Si no me miras a los ojos, no verás
el amor que guardo, ni las lágrimas 
que el viento cálido y feroz,  evaporó
con la piedad necesaria, para no ser 
derramadas.

Si no me miras a los ojos, no intuirás
los naufragios que mi alma ha sufrido 
en un mar de desengaños.

Acaso el dolor acumulado, me haya 
hecho fuerte, pero no insensible.
No soy estúpido, aunque  haya personas,
que en su notoria ignorancia lo crean.

Sé mantener a buen recaudo las opiniones que pueden quedarse
en las estaciones vacías del entendimiento.

Nunca se deja de aprender 
y para seguir creciendo, se debe tener
la suficiente humildad, para reconocer
que sólo estamos en un largo camino
y hay que seguir en él, 
superando las fatigas.

Escrito en Agosto 2017 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz".


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