tu gracia y tu bondad,
por eso mi amistad
crece con mis latidos.
El más dulce sonido,
de tu boca jugosa,
brota como una rosa
o clavel enardecido.
Amas con la dicción
que nace de tu alma,
para alcanzar la palma
desde tu corazón.
El verso resucita
al borde de tu boca,
alegre en dicha loca,
porque se necesita
que nazca en alta estima
y el verso que es amado,
por fin lo has rescatado
con su cadencia y rima.
Escrito en Julio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
Dedicado a mi gran amiga Laura Hernandez.

No hay comentarios:
Publicar un comentario