en tu labor, te entretiene.
El ocio tiene agujetas,
por la hilaridad que causa,
provoca risas sin pausa,
giramos, cual marionetas.
La risa y la hilaridad,
son motivos de alegría
y vemos pasar el día
con buena cordialidad.
Cuando se pierde el temor
a un ridículo espantoso,
tu rostro se vuelve hermoso,
lleno de paz y de amor.
Escrito en Julio 2025 por Eduardo Luis Díaz Expósito.“zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

No hay comentarios:
Publicar un comentario