sábado, 13 de agosto de 2016

Tierras de Soria

Peñas, rios,valles, montes
recamados en azul
del cielo, en un suave tul,
ribete de su horizonte.

El silencio, nuevo, ignoto,
roto apenas el sonido
soy río, en nuevo sentido
de la tierra, donde broto.

Caudales en la lozana
tierra, de verdor agreste 
en ese tiempo, que reste
de la aurora en la mañana.

Perdido mi corazón 
y fundido en la natura,
como brisa que perdura
en brotes de la ilusión.

Sin neblinas que ocultaran
la belleza resultante,
que se queda en un instante,
que nuestros ojos guardaran.

Alma, por tierra cabalgo,
fugaz, con mi pensamiento,
todo lo que veo, siento
en mi corazón de hidalgo.

Tierras de verde esmeralda,
de niñez en lozanía,
donde nace un nuevo día,
trepando al monte, en sus faldas.

El ojo mira expectante,
los cañones y las lomas,
por donde la luz se asoma,
en dedos equidistantes .

Ojo que guarda memoria,
de la nativa belleza,
donde perder la cabeza,
en estas tierras de Soria.

Escrito en Agosto 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."Zuhaitz".

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