¡Empápame de tu ser!
Eres tu mi amanecer
con su brillo y su ternura.
Eres el brío que cesa,
para que el aire circule
en tu rededor y emule
tu presencia de princesa.
Por ti, pierdo la cabeza
y vivo de tus suspiros,
mi vida dió un nuevo giro,
prendado de tu belleza.
Tu cuerpo es el manantial,
donde ha brotado una flor,
renacida en el amor,
por su cauce natural.
Ya no encuentro soledad,
pues no pasa ni un momento,
en el que mi pensamiento,
vuelva a sentir tu verdad.
Porque eres la luz que baña
de amor, por toda mi vida,
mi memoria está sumida
desde tu ser a mi entraña.
Que vibra con los sonidos
de tu voz, acariciando
la cadencia y despertando
la pasión en mis oídos.
Quiero morirme y por muerto,
resucitar en tu vida,
con un amor sin medida
siendo agua en tu desierto.
Eco de tu despertar
al mundo de los sentidos,
feliz por haber nacido
y ser tu amor, para amar.
Escrito en Enero 2017 por Eduardo Luis Diaz Expósito."zuhaitz",
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