viernes, 12 de febrero de 2016

Debajo del Oropel

La perfecta arquitectura,
que  enmascara la belleza,
termina allá, donde empieza
cayendo de su estructura .

Ocurre, que el corazón 
se ha fijado en la envoltura
y en la fingida ternura,
producto de una emoción.

Sucede, como en el arte,
haciendo que nos imprima
la imagen, materia prima,
motivo para adorarte.

Es una falsa deidad,
la imagen y el espejismo,
que se graba en uno mismo,
ocultando su verdad.

Cuando cae el oropel,
por el paso de los años,
su imagen nos hace daño,
al ver su auténtica piel.

Entonces acude el llanto
y esa verdad dolorosa,
que no ha de ser otra cosa
que el fruto del desencanto.

Escrito en Febrero 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."Zuhaitz"





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