viernes, 8 de septiembre de 2017

Una hoja a merced del destino

 Yo me atrevo y a veces consigo,
todo aquello que sueño y demando,
del sendero que voy caminando 
al cual desde mi empeño persigo.

La ignorancia mata, miente o ciega
y los sueños que quise atrapar,
otra vez me los van a negar 
y me engañan, traicionan y niegan.

Soledades, maullidos de gata,
que acompañan mi sed y tristeza 
y no pierdo jamás mi cabeza,
aunque brote un rencor que arrebata.

Miro al cielo y alzo mi nariz,
confiado, lanzo mi propuesta...
la pregunta no tiene respuesta
¿Porqué no he de ser yo, feliz?

Soy la hoja suelta del peciolo,
en amores, sólo soy triste payaso, 
convencido de que ya no me hacen caso,
condenado a seguir otra vez sólo.

 Escrito en Septiembre 2017 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz"


No hay comentarios:

Publicar un comentario