en una ilusión,
herido el corazón,
también el alma herida.
Lágrimas no dejó ver,
de ellas no sustento,
todo este sufrimiento,
difícil de creer.
Un sino despiadado,
fruto de una ilusión,
marchito corazón,
de nuevo destrozado.
Cansado ya de dar,
mi frágil vida entera,
para vivir en la espera,
en un vano esperar.
Sin un sólo latido,
con sólo su cinismo,
basado en su egoísmo
y el más oscuro olvido.
La vida es una danza
y quien no supo amar,
nada podrá esperar...
el tiempo y su venganza.
Si en el amor has mentido,
con agravio y sutileza,
piensa que es una torpeza
y hallarás tu merecido.
Volverá hacia ti tu arma,
a quien no te ame, amarás,
tu desdén lo sufrirás,
bajo las leyes del Karma.
Escrito en Mayo 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito. "Zuhaitz".
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