y las conciencias.Se hiela nuestro interior,
losa blanca que se pega a los pies.
La existencia está fresca y solidifica,
solamente en algunas acciones,
noticias acuñadas en tristes sucesos
y repentinos cambios, que nadie desea.
El verso corta el aire y desgarra la boca,
cortante, desgaja la razón y la paz,
cuando la calma se hace inexistente.
Nadie se hace idea del aire que circula,
rondando al exterior y aísla aquello
que intentamos conservar.
Escapa todo a nuestro alcance
y basta tan sólo una palabra,
para alterar el equilibrio que antes tuvimos.
Una mala noticia, un cuchillo de hielo,
que en nuestro ánimo cauteriza
el tiempo vivido y abre una herida.
Ojos absortos, la mirada pronunciada
y clavada entre el espacio de un silencio
y otro.
La vida se detiene un instante y hay reflejos
de tiempos pasados en la pantalla negra
de nuestra mente.
Una mala noticia, un dolor inesperado
y todo cuanto nos compensaba
de las desdichas cotidianas se viene abajo,
nuestras razones y convencimientos se desmoronan,
cuando soplan malos vientos.
Escrito en Enero 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz"
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