Buscando el color más intenso.

No amo el azul fuerte en la tristeza,

ni el rojo en la pasión, pues desfallece 

el alma, cuando la pasión perece 

y amargo es el recuerdo en tu cabeza.

No amo el gris perlado, en la penumbra,

tampoco al amarillo, que violenta

al cielo, que precede a una tormenta 

y oculta el tibio sol, que nos alumbra.

Si amo un verde claro en la pradera,

y el ocre de los árboles silentes,

raíces en la tierra, por presentes,

que arañan su estructura verdadera.

Amo el azul vivaz, que de los mares,

se copian como lluvia en las mil gotas

y suenan en la tierra, como notas,

brotando melodías a millares.

Aún llevo el tono cárdeno del viento,

que arrastra mi pesar en la dolencia,

de no hallar un color a la paciencia,

que guarda el más profundo sentimiento.

Escrito en Agosto 2023 por  Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.