al homófobo y al necio prepotente,
que intenta destacar de entre la gente,
al mezquino dictador y al que es clasista.
Porque todos, de una madre hemos nacido,
y en la vida siempre existe el sufrimiento,
porque nadie elige con su nacimiento
su destino, puesto que no fue elegido.
A pesar de las distintas opiniones,
se debieran contemplar, que los derechos,
son de todos, sólo cambiarán los hechos
o el impulso que hay en nuestras emociones.
Aún pensando en las distintas realidades,
que vivimos, por cultura o religión,
no tenemos más que un loco corazón,
que palpita por nuestras necesidades.
Que no hay nadie por encima o por debajo,
de ninguno de todos sus semejantes,
todos somos necesarios e importantes,
nuestro esfuerzo es recompensa en el trabajo.
Sigo fiel a ese sentir las realidades,
que demuestra, que al final somos iguales,
que no sirve: Tanto tienes, tanto vales,
sino esfuerzo, para unir las voluntades.
Escrito en Agosto 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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