sábado, 24 de octubre de 2020

Ante el Asombro

Se muestra como asombroso,
aquello que nos causa asombro 
y nos nace sobre el hombro 
en su perfil más copioso.


Asombro no es estupor,
ni tampoco es la sorpresa
que queda en el alma impresa
por su signo arrollador.


El asombro es una fiera
que asalta la percepción,
mostrándose en la ocasión 
en que ninguno la espera.


El asombro es un destello,
distorsión en la razón,
que acelera el corazón,
dejándonos sin resuello.


Es el asalto en la sombra,
un vestigio, que en verdad,
ciega con su claridad 
aunque sin saber, se nombra.

Es ese juego de dados,
que rodando, se detiene,
que se marcha igual que viene 
en trances inesperados.

Escrito en Octubre 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.








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