alguna vez, por descuido
porqué y para qué has nacido
o cuál es su resultado.
De por qué, este sufrimiento
es innato en los humanos,
o por qué, aún nos matamos
sin ningún remordimiento.
En toda la creación
no existe un ser más cruel,
que pueda compararse a aquel
que busca su destrucción.
Que olvida su realidad
en ese origen divino,
que decide su destino
y se nutre de maldad.
Que, por su propio egoísmo,
sólo intenta competir
y se olvida de vivir
proyectándose al abismo.
Esta realidad no miente
y en esos locos empeños,
destruye todos sus sueños,
se arrastra como serpiente.
Y al empecinarse, yerra,
porque ignora, que matando
también se va sepultando
más hondo, bajo esta tierra.
Escrito en Febrero 2024 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario