lunes, 31 de julio de 2023

Ajados corazones de seda.

En tu corazón de seda,
nada se guarda y nada queda.
No sentiste el zarpazo de la muerte,
sorprendiendo al completar tu mala suerte.


No hubo,  ni un triste lamento en tu entierro,
tan sólo un denso silencio, frío como el hierro.
El fin de una vida vacía,
sin risas escritas, ni alegría.


Siempre hubo una clara divergencia,
poco diálogo y mucha menos paciencia.
No he llorado, sabiendo que estás muriendo,
no estás muerta, porque muerta en vida …
permanecerás viviendo.


Pobres muertos que  caminan sin saber
si lo están,  o es el sueño de una vida,
que despierta en la amargura de su herida,
ignorando que no habrá un amanecer.


Escrito en Julio 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.




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