buscamos la protección
y es mala nuestra elección,
en su encierro te condenas.
El grueso de tus cadenas,
nunca es la solución,
tan sólo es la distracción,
que no aliviará tus penas.
Las penas son consecuencia
de este mundo en que vivimos,
que a duras penas sufrimos,
llevándolo con paciencia.
Nunca nos habló la ciencia,
de una clara solución,
en cosas del corazón,
no hay suficiente experiencia.
Tan sólo, tomar conciencia,
de que en esta perra vida,
cada cual lleva una herida,
que sanará con paciencia.
Cada cual, es su maestro,
su médico o cirujano,
lo que llevas en tu mano,
no es tuyo, pues nada es nuestro.
Tan sólo tienes las penas
y un camino por andar,
sólo tú puedes sanar,
si tienes tus manos llenas.
Sólo podrás aprender
de tus errores y aciertos,
en los áridos desiertos,
que quedan por recorrer.
Al final, nadie te ayuda,
ni te escucha o te comprende,
en esta vida se aprende,
que todo se cambia y muda.
Al franquear un abismo,
bastará tu decisión,
nadie está por la ocasión,
te tienes sólo a ti mismo.
Escrito en Julio 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario