aunque este me traicione,
me sugieren que razone
y no encuentro otra razón.
Que sembrar en mi camino
todo el amor que deseo,
porque firmemente creo,
que el amor es mi destino.
Busco en la cordialidad
y el bien hacer como meta,
sin que ello me comprometa
a perder mi realidad.
Amar en toda frecuencia
y en todas su vibraciones,
sembrar en los corazones
semillas de la inocencia.
Amar formando la idea
de que amar es redención,
si así siente el corazón,
por siempre bendito sea.
Amar es nuestro destino,
si vivimos para amar
y en todos hemos de hallar
compañeros de camino.
Escrito en Noviembre 2015 por Eduardo Luis Díaz Expósito."Zuhaitz"
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