lunes, 21 de septiembre de 2015

Hacia una Eternidad

Voy a dormir apostado
en el ojo de una cerradura, 
sin temor, porque la llave se halla en mi poder.
Sin temor a la oscuridad,
porque tu cuerpo 
lo envuelven las sombras,
cuando te amo.
Sin temor a la muerte,
si he de renacer en ti.

Estoy esperando tu llegada,
como quien espera Abril,
desde el otoño.
Como árbol solitario y desnudo,
que espera retoñar
en la alegría de los nuevos brotes.

Quiero amar y gozar la primavera contigo,
que formes parte de mi vida y ocupes
mi mente y mi corazón.
Vivir si temor a las tormentas 
y vencer a la muerte,
para amarte una eternidad.


Escrito en Septiembre 2015 por Eduardo  Luis  Díaz Expósito."zuhaitz".

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