y lágrimas que solidifican,
hay dolores que se intensifican
y creciendo en la angustia, te entierran.
Hay personas que cruzan un día
por tu vida y dan esperanza
y otras gentes, que siguen en danza,
han perdido su fe y empatía.
Hay algunos que quieren gritar
otros, sólo están en silencio
y es tan grave lo que ahora presencio,
que sin aire, me siento asfixiar.
Es la angustia vital de esta vida,
de este mundo, perdiendo valores,
que camina entre los horrores,
dentro de una civilización perdida.
No hay futuro posible y la muerte
nos espera triunfal, en la esquina,
lentamente, te acosa y se inclina,
te saluda, porque le divierte.
El amargo sabor del destino,
que nosotros tenemos forjado,
por el miedo se habrá transformado
en vinagre, de tan dulce vino.
Se transmutan todos los sabores,
que pudimos tener en la vida,
lentamente la dicha se olvida,
prisionera en estos horrores.
Hoy la vida no tiene sentido,
todo brota por imposición,
y en las cotas de la corrupción,
nada es tan real, ni temido.
Escrito en Septiembre 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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