lunes, 4 de abril de 2016

Detrás de la tempestad

Talle de cañas y brío,
corazón hilado a fuego,
desde las brasas, y luego 
templa en el cauce de un río.

Nunca supe de amoríos,
en cambio, si del amor,
porque sentí su dolor
con su abandono y su frío.

Alocada es la impresión,
de áquel que haya imaginado,
que el amor, si es deseado,
quedará en su corazón.
Aunque duela, es la verdad,
aunque el amor es eterno,
puede llegar el invierno
y su cruda realidad.

Cambiar de nido o morir
en tu corazón herido,
sin conocer, cómo ha sido,
si ha dejado de existir.

Aunque no cese tu empeño,
o te sientas derrotado,
puede ser, que haya volado
y haya cambiado de dueño.

No es suficiente razón,
para darse por vencido,
aunque te sientas herido
en tu pobre corazón.
Quien vivió su intensidad,
amando y dejando su alma,
vendrá otro amor, con la calma
que venza a la tempestad.

Escrito en Abril 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz"

Publicado en el poemario:
" Calles desiertas de la esperanza". ISBN: 978-84-15176-65-7

Depósito Legal: BI-701-2016





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