que surge del interior
y la llama en su estertor,
danzando con ligereza.
Ojos, aves de rapiña,
que buscan la fácil presa,
a quien sólo le interesa,
todo aquello que escudriña.
Ojos que en su realidad,
buscan tintes de emoción,
porque rige el corazón
y el amor es su verdad.
Ojos, de mucho equipaje,
que quieren lucir tan bellos,
que se apagan sus destellos
presos de su maquillaje.
Ojos que admiro y que quiero,
de mirada transparente,
ojos en los que se siente
un corazón muy sincero,
Escrito en Abril 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz"
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