viernes, 1 de abril de 2016

La seda con la que tejes amor y ternura

Así, mansamente,
el día cesa su frenética actividad
y las sombras, acarician 
los cuerpos de los amantes.

La espuma de los sueños 
se hace presente en sus ojos,
cuando, entre un rumor de besos
y aladas caricias, se funden en un abrazo.
Una amalgama de sentimientos,
pasean como errantes duendes
o suspiros incontenidos
en el oasis blanco de unas sábanas,
que ligeramente, cubre sus cuerpos.

Sus ojos se cierran, mientras las estrellas
abren sus traviesos ojos en guiños perpetuos
al cielo.
Y es en esa oscuridad, donde la quietud 
es un remanso, en el río de la vida,
para acercarme a tu orilla y navegar en tu cuerpo,
para hallar en ti, la seda de ternura, con la que tejes
todos mis días, para amarte cada día...
Como si fuera hoy también la primera vez,
con el mismo amor y la misma ilusión ,
en que posé mis ojos en ti, para grabar en mi alma
tu imagen a perpetuidad.

Escrito en Abril 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."Zuhaitz"








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