para quien se sabe noble
y cuenta con la certeza
de su alcurnia y su nobleza.
Nobleza, no hay más que una
y no sé es noble de cuna,
procede del corazón,
de su obra y su intención.
La clase sólo se asoma,
en el recto proceder,
en el bien saber hacer,
si el orgullo se desploma.
En toda esa entereza,
que frente a la adversidad,
mantiene nuestra verdad,
en nuestra erguida cabeza.
En toda la dignidad,
que careciendo de ornato,
es nuestro más fiel retrato
y plasma la realidad.
Sin más tesón, ni paciencia
que la plena convicción,
de tomar la dirección
acorde a nuestra conciencia.
Escrito en Marzo 2016 por Eduardo Luis Díaz Expósito."zuhaitz "
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