jueves, 12 de noviembre de 2020

El amor debe construirte, no destruirte.

Me destruyo entre tus dientes, por amarte,
en un beso, que es total y enfebrecido,
nunca supe del dolor, no lo he sentido 
hasta el día, en el que al fin, logré encontrarte.


Hoy la muerte me persigue, porque preso
de tus labios, he perdido la cordura 
y si acaso esta vida ha sido dura,
es más dura mi existencia, sin tu beso.


Soy un ave que intentaba alzar el vuelo,
ignorando, que si no sabes amar,
ya no sirve intentar poder volar,
no eres libre para recorrer el cielo.


Los anhelos se convierten en la herrumbre 
de la jaula en la que vives por amor
y descubres ante ti, un gran dolor,
al saber que no es amor, sólo es costumbre.


Y al final, tu dicha está completa y plena,
si al amar, se empieza siempre en uno mismo,
no se salvan los escollos de su abismo,
si no está de esta virtud, tu alma llena.

Escrito en Noviembre 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.





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