para abrocharse, sin ruido
el pensamiento incipiente,
en la ausencia del sonido.
Coincidir es diferente
a encontrarse y compartir,
en el grueso de la gente,
su voluntad es... Vivir.
Vivir sin gloria, ni pena,
sin temor o sobresalto,
sobre un vacío, que llena
de guijarros, el asfalto,
El ejercicio es vivir
y sin apenas, pensar,
tratar de sobrevivir,
y sin rumbo, caminar.
Nadie se quiere arriesgar
a luchar, si es su derecho,
por ello quieren guardar
su temor, dentro del pecho.
Viviendo en una inconsciencia,
a la espera de ese día,
en que por la insuficiencia
en su existencia vacía...
Hallarán, como el cordero
que se resigna a su suerte,
un camino al matadero
y el olvido, con su muerte.
Escrito en Noviembre 2020 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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