palabras formando un día,
encuentros en la alegría
y en el devenir diario.
Una meta por cumplir,
una ilusión que se estira
y en nuestro punto de mira
compone nuestro existir.
Un logro, que inadvertido
pasa, porque no podemos
detener lo que no vemos,
cuando algo nos es querido.
Un halago sin verdad,
una cruz sobre la espalda,
el agua hirviendo, que escalda
en toda la adversidad.
Una palabra mal dicha
o un gesto, que inapropiado,
queda porque es descuidado
y nos toca mover ficha.
Un día sin el abrigo
y la nieve en nuestras sienes,
dirán que es año de bienes
y ha fallecido un amigo.
Sólo es un día más,
para contar, o en olvido
dejarlo, pues ya ha cumplido
e inicia la cuenta atrás.
Escrito en Octubre 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario